viernes, 1 de julio de 2011

DÉCIMO ENCUENTRO CON LA PALABRA

10. EL CANON DE LA BIBLIA

Exploración de saberes previos (evaluación diagnóstica)
1.          ¿Qué entiendes por la palabra canon?
2.         ¿Cómo podrías asegurar que los libros que contiene la biblia son los auténticamente inspirados por Dios?

Ahora sí, entremos en materia…

EL CANON DE LA BIBLIA
1. ¿QUE ES EL CANON?
El carácter religioso de la Biblia y, particularmente, el hecho de que haya sido el medio de comunicación de Dios con el hombre es lo que motiva, desde nuestra condición de creyentes, el que este libro se lleve nuestro aprecio por encima de cualquier otro libro.
Pero a más de uno se le ocurrirá preguntar: ¿por qué precisamente de estos libros, y no de otros, decimos que contienen la palabra de Dios? Esto nos lleva a hablar de lo que se denomina el “canon” de la Biblia. La “canonicidad” está estrechamente vinculada con la “inspiración”.
El “canon” no hace que los libros sean inspirados; los libros son inspirados antes de su canonicidad. El canon oficial sirve sólo para que el creyente tenga garantía de cuáles son los libros que debe considerar como de origen divino. Una cosa es que los libros estén inspirados y, otra, que nosotros sepamos que están inspirados. "Para nosotros en concreto, el conocimiento de la inspiración del AT ha de ser adquirido a partir del testimonio del NT y de la Iglesia apostólica" (K. Rahner).
La palabra “canon” (del hebreo “ganeb” = caña, y del griego “kanon” = vara, regla) puede tener un doble sentido: norma y lista. Ambos sentidos se funden cuando aplicamos el término a las sagradas Escrituras. Canon de la Biblia es, pues, la lista de los libros que consideramos como inspirados; libros que se constituyen en norma de vida para la comunidad de creyentes que los acepta como tales.

NOVENO ENCUENTRO CON LA PALABRA

9. VERDAD

Exploración de saberes previos (evaluación diagnóstica)
1.         ¿Qué es la verdad?
2.         ¿Por qué crees que es importante la verdad a la hora de estudiar las Sagradas escrituras?

Ahora sí, entremos en materia…
VERDAD
Es una consecuencia de la inspiración. Naturalmente el Espíritu no se hace responsable de todo lo escrito por el hagiógrafo; como dice la misma constitución DV, ese aliento o presencia del Espíritu se encuentra en aquella "verdad que Dios quiso consignar en las sagradas letras para nuestra salvación" (DV 11). No se trata, pues, de verdades del orden histórico o científico, sino de las relativas a la salvación del hombre; y aun para rastrear esa verdad, "para sacar el sentido exacto de los textos sagrados, hay que atender no menos diligentemente al contenido y a la unidad de toda la Sagrada Escritura, teniendo en cuenta la Tradición viva de toda la Iglesia y la analogía de la fe" (DV 12).

En consecuencia:
- El objeto formal de la revelación es el misterio de salvación realizado en Cristo, por eso "ninguna realidad de este mundo es objeto de una enseñanza divina... a no ser bajo el aspecto particular de su relación con el misterio de la salvación" (Grelot).
- "La verdad bíblica es una verdad que progresa con su propia dialéctica. Las palabras y los acontecimientos, de un libro a otro y sobre todo del A al NT, adquieren un significado cada vez más profundo. Hay además rectificaciones y adaptaciones: Dios mismo corrige, integra y completa ciertas presentaciones insuficientes. Hay en todo esto una dialéctica: los diversos libros y las diversas teologías en la Biblia parecen presentar opiniones contradictorias, pero en realidad se 14trata del diálogo de dos modos de ver que se controlan mutuamente" (L. Pacomio).- "La verdad de Dios no está más que en toda la Biblia, en la Biblia tomada en conjunto" (P. Benoit). "Absolutizar una proposición es caer en el error. La verdad de la Biblia es privilegio del libro completo" (L. Pacomio).